El dolor y la dignidad de las más de 80 familias que fueron brutal e ilegalmente desalojadas el pasado 26 de enero del 2016, del Callejón de Matencio o Villa Cristo, como ellos le llamaban, fueron lanzados al cajón de archivos como si no hubiesen sido seres humanos, incluyendo niños pequeños, los afectados.
A pesar de que organizaciones como la ONU, el Ministerio Público de El Seybo, y todo aquel que pudo conocer el caso, lo repudiado y considerado uno de los abusos más terribles contra la dignidad humana de los últimos años, la Procuraduría General de la República archivó el caso y ha dejado que los malhechores sigan con sus vidas abusando con su poder a los que menos pueden.
“Por eso seguimos denunciando a la luz del día la cobardía de aquella noche en que la impune Central Romana apuntó con sus armas a los niños y niñas” Radio Seibo.
La directiva del Movimiento Unidos por una Mejor Provincia El Seibo y comunitarios de distintos campos y barrios se reunieron éste miércoles, 31 para acordar los pasos a seguir en […]
